COMO INFLUYE LA BIOMASA EN LOS RESIDUOS SOLIDOS

Los residuos sólidos urbanos son aquellos que se originan en los núcleos de población como consecuencia de la actividad habitual y diaria del ser humano. Se clasifican en dos grandes grupos: Residuos Sólidos Urbanos, RSU, y Aguas Residuales Urbanas, ARU. Las principales aplicaciones de estos residuos son como fuente de energía, aprovechándolos directamente o transformándolos en otras sustancias combustibles, o como materia prima, para someterlos a un proceso de reciclado y generar otros productos.

Los residuos sólidos urbanos constituyen un caso singular dentro de la biomasa. De acuerdo con la definición de biomasa, sólo la parte orgánica de los residuos sólidos urbanos puede ser considerada como tal. Así, la valoración energética de los residuos sólidos urbanos constituye uno de los últimos pasos en el proceso de eliminación de estos residuos. Los residuos sólidos urbanos tienen una composición muy variable, pero el contenido en materia orgánica suele ser del orden del 50%, dependiendo sobre todo del tamaño de la población y de su nivel de vida. Al aumentar ambas magnitudes, la tendencia es una disminución en el contenido de materia orgánica.

Las aguas residuales urbanas, ARV, están formadas por los afluentes líquidos que genera el ser humano en su actividad diaria, se engloban dentro de lo que se ha catalogado como biomasa animal. Se trata de residuos de un contenido en agua muy elevado, razón por la que su evacuación se realiza en ríos y en el mar. De este proceso se obtiene un residuo denominado lodos de depuradoras, donde se queda la mayor parte de materia orgánica presente en las aguas residuales. Este residuo se puede procesar para obtener biogás, que a su vez, puede utilizarse como combustible.

Desde el punto de vista del impacto medioambiental, la mejor estrategia de gestión y eliminación de residuos consiste en combinar procesos de recogida selectiva con reciclaje y compostaje, limitando las opciones de vertido e incineración por los desechos residuales de los procesos anteriores. Igualmente, la práctica de estas actividades no está suficientemente extendida y los costes actuales de recogida y reciclaje, como también los precios de mercado de los productos reciclados, no favorecen el tratamiento integral para todos los residuso.

 

 Las opciones de valoración energética no constituyen por sí mismas la solución al problema de eliminación de los residuos y de su impacto ambiental. Asimismo, pueden ayudar a resolver una parte del problema, a la vez que permiten el aprovechamiento energético de una fuente renovable.

 

 

 La basura suele estar compuesta por: